Rotura de
Menisco
La rotura de menisco es una de las lesiones de rodilla más frecuentes. Cualquier actividad en la que pivotes sobre la rodilla o la gires de manera enérgica y brusca, en especial con todo el peso de tu cuerpo encima, puede causar la rotura o el desgarro de un menisco.
Cada una de las rodillas tiene dos meniscos, piezas de cartílago en forma de «C» que actúan como amortiguadores entre la tibia y el fémur. La rotura de menisco provoca dolor, hinchazón y rigidez. También podrías sentir un bloqueo cuando quieres mover la rodilla o tener dificultades para extender la rodilla por completo.
El tratamiento conservador, como descansar, aplicar hielo y tomar algún medicamento, a veces es suficiente para aliviar el dolor de la rotura de menisco, que no bloquea la rodilla y dar tiempo a la lesión para que cicatrice por sí sola. Sin embargo, en otros casos, la rotura de menisco requiere una reparación quirúrgica.